El comedero de casa es lo más simple que puede haber. Una tabla sobre dos caballetes, un trozo de corcho, otro trozo con algo de musgo, una rama retorcida de no sé qué y para de contar. Con todo eso puesto cerca de la balconera, monto el trípode dentro del comedor y hago las fotos tan ricamente sin pasar frío, simplemente apartando la cortina.
Así que van por delante unas cuantas tomas del peti, más una estampa nevada de Lo poble que se va a colar enmedio... :-)
Menuda reportera que estas hecha... escondida tras las cortinas con la cámara camuflada, cualquiera se acerca por ahí, jajaja, que lo pillas infraganti.
ResponEliminaUn saludo
Jeje, lo único que no soy es intrépida, porque las fotos las hago sin pasar frío, jaaaaaaaaa
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